sábado, 11 de febrero de 2012

LIBREVILLE: cruce de estampidas y balas de cobre


En la vigésimo octava edición de la final de la Copa Africana de Naciones han llegado dos equipos con dos estilos realmente marcados; un equipo europeizado y fuerte en el aspecto físico el otro en la vena libre y espontánea africana. Son Costa de Marfil y Zambia los protagonistas que abarrotarán el partido cumbre de Gabón-Guinea 2012.
Las últimas ediciones han tenido grandes finales muy reñidas dos vías penales y las otras por diferencias de un gol. Y en esta ocasión el cartel de los finalistas es abismal.
A Costa de Marfil se le tiene por un equipo de mega estrellas que lustran las ligas europeas, como lo muestra el desplegado de medios que sigue a los Elefantes por todos lados, de hecho, en los hoteles siempre tuvieron su zona ultra vip y jugadores de otros países les solicitaban tomarse fotos, cual estrellas de rock.
La contraparte es Zambia, que pese a su aporte en la escena africana, subcampeón continental en dos ediciones 1974 y 1994, nunca ha participado en un Mundial.
Apodados los Chipolopolo (balas de cobre [mineral base en la economía en el país] por mucho tiempo la selección portó en su uniforme una franja de color cobre que le distinguió), anónimos en los medios internacionales, la mayoría de sus seleccionados juega en las ligas africanas y es una escuadra en la que pondera el espíritu colectivo.

ZAMBIA
El combinado zambiano es la grata sorpresa del torneo y además llega invicto a la final. Tras ganar a Senegal en la etapa de grupos, todo fue in crescendo. Los Chipolopolo han desatado la locura en su nación, cuentan con una base de futbolistas que viene jugando hace bastante tiempo, su juego veloz, descarado y espontáneo se fundamenta en los tres fantásticos de corte underground: Christopher Katongo, Emmanuel Mayaka, Rainford Kalaba. También el guardameta Kennedy Mweene ha sido clave al hacer varias paradas ante Ghana y detener un penal a Gyan (alarga sus yerros en citas mundiales).
El líder de la federación zambiana, Kalusha Bwalya, ex gloria del América de México noventero, ha reorganizado las tropas para reconstruir el plan abruptamente cortado hace décadas, salir del ostracismo de la escena mundial.
Para Zambia el juego decisivo tiene una carga emotiva extra, puesto que vuelven al país donde pereció un representativo nacional el 28 de abril de 1993, presumiblemente la mejor generación de futbolistas que el país había dado.
Aquel equipo viajaba a Senegal y estaba a unos puntos de conseguir la clasificación a USA 94, pero el avión militar que rentó la federación zambiana, nunca llegó a Dakar, se estrelló en las costas de Libreville y el accidente esfumó las posibilidades para que Zambia participara en su primera Copa Mundial.
Para desvanecer la tragedia, ayuda que Zambia haya superado el objetivo de inicial, las Semifinales, por lo que el técnico francés Hervé Renard ha emitido la máxima de buscar la gloria para los caídos.

COSTA DE MARFIL
Costa de Marfil fue campeón en la edición de 1992 y quiere resarcir el mal recuerdo de 2006 cuando perdió en el Estadio internacional de El Cairo la final ante Egipto por la vía de los penales.
Mientras tanto, los aficionados marfileños esperan que esta generación de oro esté a la altura de sus cualidades de una vez por todas y forje su legado alzando la Copa. El equipo que tanto prometió en la última década encuentra a sus estrellas en gran forma, el grupo ha encontrado un sosiego que emana el estratega Francois Zahoui quien ha templado los ánimos y encausado el ego de sus pupilos, logrando equilibrar el juego de los Elefantes.
Además de su intimidante línea ofensiva, Zahoui ha puesto énfasis en el cuadro bajo del equipo acorazándolo con una media rocosa: Didier Zokora, Yaya Touré, Tioté Cheick, Coulibaly Kafoumba y Emanuel Eboué.
La batalla táctica será fundamental , de hecho, Zambia aprovechó este aspecto para derrotar a Ghana. Zahoui espera que antes de emplearse a fondo en la pizarra ante una posible desventaja, su delantera (Drogba, Kalou, Gervinho) desinfle el desorbitado ánimo de los zambianos.

El héroe nacional
Es brutal el sentido de patriotismo con el que se sigue al combinado marfileño, quizá una de las pocas válvulas de escape en una nación ensombrecida por la guerra civil, circunstancia que afecta la conciencia de los jugadores que cargan con ese costal de ilusiones.
Claro ejemplo es Didier Drogba, no sólo líder de los Elefantes, sino que el compromiso lo lleva a acciones extradeportivas, preocupado por los conflictos en su país, es miembro de comisiones de diálogo y conciliación en los conflictos armados en Costa de Marfil.
Drogba entiende y afronta el torneo como su estatus de figura le demanda, lucha como el que más y se empeña en lograr un campeonato que condecoraría su gran carrera, pero su inspiradora determinación por la victoria tiene un trasfondo más importante, y ha sido que como líder ha logrado que sus compañeros se enfoquen en alcanzar su obra maestra, el título continental que otorgue un éxito colectivo y que éste incida en la cohesión nacional.

Por la supremacía africana
La batalla tendrá sus grandes componentes: La ambición de Drogba, el glamour de los hermanos Toure, el descaro de Salomon Kalou, la entrega del capitán Katongo, el desparpajo de Mayuka, la tenacidad de Zokora, el juego aéreo de Sunzu, la imbatibilidad, de Barry Copa, el gran momento de Mweene.
En la reciente caminata en las playas de Libreville y después de cantos fúnebres en memoria del escuadrón fallecido, el gurú zambiano, Kalusha, cerró la ceremonia con un: “Sus sueños son los nuestros”. Para Zambia ya todo es ganancia, los logros catapultan los ánimos y todo parece más asequible. En Costa de Marfil la presión es gigantesca.
Puede que los Elefantes sean mejor en todos los niveles de juego que los Chipolopolo pero de historias sorprendentes se nutre el futbol, basta recordar hazañas recientes por el Alcorcón o el Mirandés, dicho esto, en el torneo de naciones de las irregularidades por excelencia, no hay imposibles.
El cruce de misiones es rotundo; las Balas de Cobre ansían complementar un sueño truncado, los Elefantes buscarán mitificar a sus héroes de marfil. Domingo a la una de la tarde el estadio Angondjé en Libreville (fabricado por el gobierno chino) será el epicentro del futbol mundial.

Datazo
En las ediciones que Zambia ha llegado a la final (Egipto 1974 y Túnez 1994) ha derrotado a Costa de Marfil por mismo marcador de 1-0.
En Senegal 92 Costa de Marfil eliminó a Zambia ( 1-0) en Cuartos de Final.